Si bien el sol es el enemigo número uno de la piel y de los procedimientos que permiten mejorar la apariencia, existen varias alternativas seguras que te puedes realizar en los meses de calor.
Recién comienza febrero, sinónimo de vacaciones de verano para los chilenos y el momento ideal para lucirse con nuestra mejor versión. Pese a que la mayoría de las personas reservan el otoño, invierno y primavera para recurrir a tratamientos estéticos, la época estival también es un buen momento para realizarlos, eso sí, con las precauciones correspondientes.
Si bien, el sol y el calor al que nos exponemos durante el verano pueden hacer más incómodos los resultados posteriores a una intervención -especialmente las invasivas, como las cirugías-, existen aquellas que no tienen problemas si se realizan. Para eso, es importante tener en claro cuáles son los procedimientos estéticos que se pueden realizar en esos días. A continuación, te mostramos aquellos que son mínimamente invasivos:
Tratamientos con ácido hialurónico: los rellenos con este producto lo han convertido en uno de los tratamientos favoritos de la medicina estética. Esto por su eficacia, resultados naturales y seguros. Con el ácido hialurónico se pueden tratar diferentes áreas, como arrugas en el rostro y cuello, flacidez, ojeras, labios e, incluso, permite levantar la punta de la nariz (rinomodelación) y realizar perfilado y definición del mentón, entre otros. Se recomienda no tomar sol en los dos primeros días.
Tratamientos con toxina botulínica: El también conocido Botox® ha tomado fuerza en los últimos años, ya que es uno de los tratamientos más solicitados para suavizar líneas de expresión, especialmente, las de la frente, entrecejo y «patas de gallo». Si te pones toxina botulínica, se aconseja no exponerse al sol los primeros dos días, ya que la zona puede estar irritada.
Tratamientos con hilos revitalizantes: Este es otro tratamiento facial que se puede realizar durante todo el año. Se trata de una alternativa no quirúrgica para tratar la forma del rostro, alterada por la flacidez y arrugas. Su efecto dura más que el Botox® y los hilos se reabsorben por sí solos. Se recomienda no exponerse al sol en las dos primeras semanas tras el tratamiento.
Tratamientos de cavitación y radiofrecuencia: Una de las grandes enemigas del verano es la celulitis. Con los años han salido al mercado diferentes técnicas para poder atenuar la apariencia de piel de naranja, desde masajes reductivos hasta algunas más tecnológicas que requieren máquinas, como es el caso de la cavitación y radiofrecuencia. Si usas esta técnica, hay que evitar exponerse al sol entre las primeras 24 y 48 horas.
HIFU: El High-Intensity Focused Ultrasound es un ultrasonido que emite una temperatura interna de hasta 60°, lo que genera focos de miocoagulación a nivel de la piel y tejidos profundos. Esta técnica es capaz de mejorar el aspecto del rostro y cuello, otorgándoles firmeza y reduciendo la grasa, además de atenuar las arrugas. No es invasiva, es indolora y se puede realizar durante todo el año. Lo único que hay que tener cuidado -como con cualquier tratamiento- es la exposición al sol, además de hacerlo con protector solar, se recomienda hacerlo entre 4 y 5 días después del tratamiento.
Recuerda, independiente del tratamiento estético que desees realizarte, es indispensable usar constantemente bloqueador o pantalla solar al momento que te expongas al sol, ya sea verano, primavera, otoño o invierno. Te recomendamos siempre consultar con un experto antes de realizarte cualquier procedimiento, puedes agendar con nuestros médicos una consulta y así entender cuál es el tratamiento más adecuado para ti.
