La kinesiología es clave en el posoperatorio de una cirugía como la abdominoplastía, su finalidad es prevenir posibles complicaciones y potenciar los resultados deseados por la paciente ¿Cómo se logra?

La kinesiología es fundamental para realizar rehabilitación post cirugía plástica – como es el caso de una abdominoplastía- la que ayudará a prevenir posibles complicaciones y potenciará los resultados deseados por la paciente.

Así, lo afirmó la kinesióloga de Clínica Nea Grace López M. quien, además comentó que el objetivo “es contribuir de manera global en el bienestar del paciente, sobre todo durante el período de recuperación, tanto física como emocional, brindando confianza y seguridad”.

Kinesiología posoperatoria

La kinesiología en el proceso posoperatorio, ayuda a la rehabilitación y reparación del sistema tegumentario, lo que permite una correcta cicatrización y recuperación de los tejidos.

La kinesióloga explica que al respetar las etapas del posoperatorio y las fases de cicatrización, se “minimizan las complicaciones y, por ende, se promueve la independencia del paciente para que pueda retomar sus actividades diarias”.

Ante esto, es vital proporcionar educación al paciente, respecto de las posturas, para así evitar la “tensión de la cicatriz” y eventual dehiscencia de la herida. Esto, en conjunto, con los tipos de respiración – mediante ejercicios – ayudarán a contribuir para una óptima recuperación del paciente.

¿Cuándo comenzar con las sesiones de kinesioterapia posoperatoria?

Las indicaciones de rehabilitación están dadas principalmente por el cirujano plástico que realiza la intervención. Sin embargo, éstas se pueden iniciar posterior a la cirugía desde el tercer día.

¿En qué consisten las sesiones?

Las sesiones están orientadas a la necesidad de cada paciente, pero básicamente consisten en el manejo de dolor con:

• Electroterapia
• Drenaje linfático manual para movilizar edema
• Aplicación de fisioterapia como ultrasonido
• Manipulación de fascia
• Ejercicios de movilidad pasiva y activa
• Estiramientos
• Ejercicios respiratorios
• Manejo de cicatriz
• Evaluación de alteración de la sensibilidad
• Reeducación postural
• Educación, orientada al paciente con respecto al tratamiento de cuidados, precauciones y posibles complicaciones

¿Cuántas sesiones mínimas y máximas se deben realizar?

Se requieren entre 6 y 10 sesiones de rehabilitación de posoperatorio, por la complejidad de la cirugía.

La frecuencia y la totalidad de las sesiones, se adaptarán según el paciente y el tipo de intervención. Esto dependerá de la evolución y respuesta de cada persona, aunque de igual manera se evalúa sesión tras sesión.