¿Desproporción y/o dolor de espalda? Un tamaño grande de las mamas puede convertirse en una verdadera molestia desde el punto de vista físico y psicológico. Sin embargo, en la actualidad existen técnicas de reducción mamaria que mejoran considerablemente la estética, armonía e incomodidad.
La reducción mamaria o mamoplastía de reducción es una cirugía efectiva para tratar la hipertrofia de las mamas. ¿Y en qué consiste? Según el doctor Nicolás Pereira, cirujano plástico y reconstructivo y director médico de Clínica NEA, «en la extracción de piel, tejido mamario y grasa, además de la elevación del complejo areola-pezón con el fin de lograr una mama estéticamente bonita».
Por otro lado, este procedimiento -que mejora la proporción de las mamas de acuerdo a la contextura de cada mujer- se recomienda para aquellas que presenten:
- Mamas demasiado grandes en comparación con su contextura.
- Peso excesivo de las mamas que producen una caída de estas (ptosis).
- Una mama evidentemente más grande que la otra (asimetría).
- Dolor dorsal o cervical.
- Irritación constante del pliegue a nivel del surco submamario.
- Marcas de hundimiento en la piel de los hombros debido a los tirantes del sostén.
- Limitación de actividades físicas debido a molestias o peso de las mamas.
- Problemas de autoestima y confianza.
Así, la mamoplastía de reducción se puede realizar a cualquier edad, una vez completado el desarrollo mamario.
Cirugía
La técnica que se usa para reducir el tamaño de las mamas puede variar, sin embargo, el objetivo siempre será retirar el exceso de tejido mamario, grasa y piel sobrante, remodelando las mamas y elevándolas según la contextura de cada paciente.
Por eso, el cirujano plástico y reconstructivo evaluará la técnica más acorde que permita:
- Preservar de irrigación sanguínea al complejo areola-pezón.
- Resecar glándula.
- Resecar piel.
- Remodelar la glándula mamaria remanente.
¿Y de qué puede depender? De distintas variantes. Entre ellas, del grado de ptosis o caída, del volumen final que se desee y de la recomendación del especialista.
Recuperación
Al terminar la cirugía, se protegen las mamas con apósitos, telas y un sostén postoperatorio que deberás usar a lo largo del período de recuperación.
Durante algunos días, es normal la disminución de la sensibilidad en los pezones, así como ardor o molestias durante las dos primeras semanas. Pese a ello, el posoperatorio es bien tolerado.
Por otro lado, si bien los resultados los verás de inmediato, la hinchazón y las cicatrices tardarán más tiempo en atenuarse. Por esto mismo, también deberás cuidarte unas 4 semanas antes de retomar cualquier actividad física.
Principales beneficios de la cirugía
- Disminuye el volumen de las mamas y, por ende, mejora la proporción.
- Termina con el dolor de espalda, cuello u hombros.
- Mejora la postura.
- Mejora la autoestima y la calidad de vida.
- Optimiza la capacidad de realizar actividades físicas sin molestias.
- No afecta la lactancia.
- Tiene cobertura de Isapre en la medida que esta reducción sea mayor a 350 grs. por mama, aproximadamente.
Ficha técnica de la mamoplastía de reducción
- Tipo: Hospitalización de 1 noche
- Anestesia: General
- Tiempo: 2 a 3 horas
- Dolor: Leve
- Recuperación: 10 días
- Actividad moderada: Después de 15 días
- Reinicio de actividad deportiva: 1 mes
- Cobertura: Sí, en la medida que la reducción sea mayor a 350 grs. por mama